Blog de Psicología
En Psicología, hablamos del Síndrome del niño hiperregalado para referirnos a la actitud de los niños y niñas, que tras haber recibido una gran cantidad de regalos y haber sido totalmente sobreestimulados con ellos, ya no valoran lo que reciben, sólo quieren abrir más y más regalos y recibir todo lo que se les pasa por la cabeza.
Los niños, al igual que las personas adultas, también pueden verse afectados por situaciones de estrés.
El trastorno disociativo es un trastorno mental en el que existe una desconexión y una falta de continuidad entre pensamientos, sentimientos y conductas una vez que la situación traumática y dolorosa ha desaparecido.
Nuestro actual estilo de vida está marcado por la presión del tiempo y la inmediatez. Normalmente tenemos más cosas que enfrentar y que hacer a lo largo del día que el tiempo del que disponemos para ello, realmente. Esto se relaciona con el estrés y la ansiedad.
Cuando hablamos de violencia, ésta puede ser física y/ o psicológica. Estas formas de violencia pueden ocasionar diferentes psicopatologías, siendo las más comunes: la ansiedad generalizada, la depresión, los problemas de autoestima y el estrés postraumático.
Los niños y las niñas diagnosticados o no de altas capacidades se dan cuenta de su diferencia desde que adquieren conciencia individual. Esta diferencia esconde en numerosas ocasiones un sentimiento de soledad e incomprensión de mayor o menor intensidad, que a la larga derivará en posibles trastornos emocionales.
Tener problemas con las personas de nuestro entorno puede afectarnos física y psicológicamente. Diversos estudios demuestran que los conflictos aumentan la hipertensión y los problemas cardíacos.
La dependencia emocional consiste en una serie de comportamientos considerados “adictivos” , que se dan en una relación social y se caracteriza por una asimetría en el rol que desempeña cada uno de los miembros de la relación.
Los niños, sobre todo cuando son muy pequeños, manifiestan la aparición de un problema mediante un cambio de conductas, es decir, hacen cosas que antes no hacían, y viceversa. Estos comportamientos llamativos nos permiten a los adultos darnos cuentas de que algo extraño puede estar sucediendo.
El apego se define como los vínculos emocionales que desarrollamos con las personas con las que nos rodeamos desde que nacemos. El tipo de apego que tenemos durante la infancia determina las relaciones sociales y la elección de pareja en la vida adulta.
El trastorno de ansiedad por separación es un problema de ansiedad en el que los niños sienten miedo cada vez que tienen que separarse de las figuras de apego.
El trastorno por atracón es la patología del comportamiento alimentario más reciente. Su prevalencia ha ido en aumento, principalmente en el mundo occidental.