Obsesivo-compulsivos, TOC
Las obsesiones son pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se la persona experimenta como intrusivos e inapropiados, y que le causan ansiedad o malestar. Estos no se reducen a preocupaciones excesivas sobre problemas de la vida real, algo que nos ocurre a todos en algunos momentos de nuestra vida por diferentes motivos. La persona que sufre obsesiones habitualmente reconoce lo inadecuado de éstas e intenta librase de ellas.
Las personas que tienen estos trastornos realizan compulsiones con el objetivo de librase de las obsesiones. Las compulsiones se definen por comportamientos o actos mentales de carácter repetitivo que el individuo se ve obligado a realizar en respuesta a una obsesión o con arreglo a ciertas reglas que debe seguir estrictamente, además el objetivo de esos comportamientos es la prevención o reducción del malestar o de algún acontecimiento negativo, sin embargo no están conectados de forma realista con aquello que pretenden neutralizar o prevenir o bien resultan claramente excesivos.
Las obsesiones y compulsiones provocan malestar clínico, representan una pérdida de tiempo e interfieren en la vida cotidiana de la persona que las sufre en diferente medida, en ocasiones pueden invalidarle ya sea para la vida cotidiana en general o para ciertos trabajos, relaciones, etc.
Las obsesiones más habituales, aunque pueden darse con un gran número de temas y circunstancias, están relacionadas con:
- La limpieza y la contaminación.
- Con el orden.
- Con los celos.
- Con la muerte.
- Con la inseguridad de haber entendido o realizado algo correctamente.
- Con el miedo a contraer una enfermedad o a contagiarse.
- Con la sensación de tener todo bajo control.
Los trastornos obsesivo-compulsivos tienen tratamiento.
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